27 de Diciembre de 2012
20:42
Fue una navidad más sin verte, apenas adivinando lo que haces y sientes. Esta noche caminé nuevamente alrededor de tu casa de antaño, escenario anónimo de tantas vivencias contigo.
Como acostumbro hacer, dejé dos rosas rojas en la esquina de aquél distante adiós:
Liliana:
Amor imposible,
Amor perdido,
Canción bella que entono a solas,
mientras regresas.
De vuelta a la normalidad de mi vida sin ti, tal como ha sido desde hace largos años, vivo la nostalgia, la pena y la febril devoción de estar contigo, tan cerca como pocas veces desde cuando nos separamos.
Parece demencial, frenético e inútil, pero me mantiene con vida.
Me alegra haber saludado ese amor que no olvido, que mantengo latente en el alma aguardando tu retorno. Me embeben los sonidos de las canciones que me saben a ti, que te mantienen presente en mi memoria.
En secreto mantengo repitiéndolas en un acto repetitivo, pertinaz y agudo, pero íntimo y vital. A unos metros, recordaba nuestras siluetas abrazadas en la noche, momentos
-Mientras regresas
Esperanzas - Los Pecos
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