9:36
Para que sepas que no te olvido
debo confesarte como otras veces
que te me convertiste en mil cosas
multiplicadas por cada instante contigo
respiraciones profundas entre tus senos
y manantiales de fruta entre tus muslos.
Te recuerdo, ¡Cuánto te recuerdo!
viajas conmigo sin saberlo
duermes a mi lado y escuchas mis susurros
y hasta te abrazo dormido feliz de tenerte
tu cintura es tibia, tu cuello es suave
transmutada en formas de mi almohada.
Comes a mi lado y te siento respirar
y cuando me baño estás ahí al frente
entre lluvia caliente y jabón suave,
espumas de mujer entre antojos
deslizándose livianas entre tus curvas
como describiendo ondas en el aire.
Pero sobre todo, me visitas en mis días
en forma de mariposas vivaces
en las ventanas de mis pensamientos
y escribes a voluntad, en tantas formas distintas
como nubes, como música y como rumor
en las páginas inquietas de mis sueños.
Hola, te felicito por tu blog. Llegué hasta él, por pura casualidad, pero me detuve porque ese es mi nombre y por algunos detalles más, que por unos instantes me llevaron a pensar (soñar, ilusionarme) que tal vez tú, pudieses ser él y de este modo reencontrarlo. Pero al leer los poemas veo que no, que no lo eres. Solo la coincidencia de llevar mi nombre y quizá el mismo o similar destino...
ResponderEliminarDe todas formas leo tus poemas y reitero mis felicitaciones y te doy las gracias por la ilusión que ha hecho acelerar el ritmo de mi corazón por unos fugaces instantes...