Mayo 22 de 2022
11:23
Tus ojos viajan a otros cielos
y los míos se quedan esperándote
no hay música de fiesta
sólo romanzas de nostalgia
evocando tus manos tibias
y los átomos de tu voz.
Los lugares enmudecidos
por donde hemos pasado,
se quedan impávidos, aguardando,
testigos mudos de noches dulces
cuando nuestras bocas se buscaban
y nuestros cuerpos se anudaban
en abrazos que aún arden.
Y en este muro de melancolías
aún siento la piel tibia
como una cascada tersa
desde tus senos y tu ombligo
camino de mis deleites,
¡Tan cerca, tan cerca!
hasta el abismo húmedo y salado
donde me extravío en ti
Recuerdos, recuerdos, recuerdos
prisiones de azúcar,
mazmorras de aromas
donde se escuchan tus susurros
líricas tersas de tu garganta
-hasta donde se ha asomado mi virilidad-
para sosegarme entre cafés y añoranzas
hasta cuando regreses.
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