Agosto 24 de 2023
18:35
Esta inquietud de saborearte otra vez,
de inundarme de tu mundo simple,
de extasiarme en tu voz sin tiempo;
esta necesidad de seguir conociendo
las coordenadas de tu rosa gentil
primero extraviarme entre tus brazos
y luego encontrarme entre tus muslos.
Sexo de mujer, piel de pétalo y pudor;
gotas salpicadas, lluvias de rocío,
un coctel para encender las ganas
aromas de frutas, texturas de ámbar;
gemías sobre mí y yo soñaba despierto
fundiste tu rostro bello en mi tallo
y bebimos historias de amor sin palabras.
Mi vida entera contenida en tus manos;
un millón de placeres que desconocía
naufragando entre tus calles para correrme;
fui amor, fui gozo, fui deseo y obsesión
fui tu deleite límpido y tu prisión perfumada;
y luego me abriste la tuya, ansiosa de mí,
¡Cuánto placer en recordar como me amas!
¡Cuántas
incógnitas entre tus senos,
y ganas de abrir con mi lengua tu cerrojo!
Si me dices «no»
se arrodilla mi alma.
Si me dices «sí» colapsan mis ansias.
Y como sea, en mi camino sin retorno,
lloveré entre tus piernas tormentas blancas,
néctares de hombre, gotas sobre tu cuerpo.
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