Mi pecho arde, esperándote

Julio 24 de 2022
14:32

Mi espalda reclama
los recorridos de tus dedos
entre el tibio susurro
de tu voz de seda.

Mis mejillas no se engañan
saben cuando estás cerca
desde el principio, una noche,
proximidad de un beso,
alegría floral de tu piel.

Y despliego al viento
un llamado de urgencia
intentándote con desesperación
la piel no encuentra plazos,
es la ansiedad por tu cercanía.

Eres tú y es todo
no estás y es nada;
la melancolía retorna, 
gris, fría, áspera, cruel, austera.
Pasión de vino rojo por tardes mejores
expectativas por una más a tu lado.

Eres lo único que quiero conservar;
eres el siempre presente
en las hojas de mi libro
en las horas para amar
en las pausas en que siento frío
en las canciones enjugadas con un beso tuyo,
evocadas por casualidad o por deseo.

Estás aquí dentro y lo sabes
estamos lejos y es tan triste
pasan las mismas horas, las mismas tardes,
y giran los recuerdos como hojas al viento,
semillas inestables que buscan tu tierra
que se hunden en tus secretos...
¡Regresa, con todas tus galas
que mi pecho arde, esperándote!