21:21
y descubrí tus secretos
sentí que te conocía
pero eras tan dulce y nueva
que supe que estaba perdido.
Tuve miedo y asombro
y una sensación de caer en el vacío
mientras te sentía
cerrando mis ojos inevitablemente
aún queriendo mantenerlos abiertos
siempre, siempre, siempre
para no dejar de leer tus gestos
y explorar su superficie.
Sabía quién eras
y de dónde habías venido
como si te conociera de memoria;
pero eras luna y fruta desconocida
fascinante como el cielo
contándome con tus caricias,
con tus suspiros,
con el estremecimiento de tu vientre,
y el de tu respiración,
una historia que no olvido.
Cuando te tuve
tuve tu eternidad entre mis brazos
y viajé a tu universo simple,
a tus galaxias complejas
Y te lo juro:
ya no quise volver al mío....
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por regalarme tu tiempo y permitirme compartir estas líneas. Deja tus comentarios con el corazón, tal como yo he regado estas cartas.