Poema de tu cuerpo

 Agosto 7 de 2020
16:41



Te contemplo desnuda
y es fragancia de delirios
tus pasos elegantes
tus movimientos sutiles
y esa piel suave y clara
saludándome tan cerca.

Hay dos lunas dulces
mirándome fijamente
goteando desde tus hombros
tan fijas y tan móviles
mensajes de mujer
tersos y redondos
a veces néctar en mi boca
a veces frutas que juguetean. 

Y no puedo evitar mirarte
mirarte a los ojos, digo,
como pidiendo tu permiso
para poder deleitarme.
Como una cascada de poesía
cuyas aguas sinuosas
delinean ondas de tus caderas.
te describo con la mirada
hasta tus pies delicados.

Y desde tu cuello tibio
surcado por tus cabellos oscuros
como líneas de tus pensamientos
sigo su rumbo agitado y suave
en un camino invisible
hasta la frontera de tu sexo
espacio de delicadezas
donde entre éxtasis he bebido
y tras nuestros rituales
he puesto mi bandera.

Y algo que no sabes
porque he tenido tal placer,
sin que me mires,
es que he hablado misterios
divisando tu espalda
lienzo silencioso
de mis imágenes contigo
tu geografía de mujer
que he transitado con mis besos.

Y he besado tus manos
y me enredé entre tus muslos
viajero feliz en tu barca
he remado hacia tu boca
y he temblado mil veces
sintiéndola con mis labios,
misterio que no explico
tomando tu vida
apresándote por los tuyos.

Boca de mis delicias
jamás a nadie contadas
pues no es suficiente decirlo;
y mi adicción a tus ojos negros
en los que me pierdo sin remedio
contando penas de extrañarte
cantando poesías mientras los miro
haciéndote tan mía en un instante
rendida en un orgasmo azul
imagen que jamás olvido.

¡Oh, tu cuerpo!
¡Oh, tu sonrisa!
¡Oh, las horas recostados,
o desnudos bajo el agua tibia!
Tu cuerpo como un poema
que disfruto leyendo
y añoro entre melancolías
ecos de un ayer infinito
que vuelvo a leer a solas.

Que regreses a mi vera
a mis manos ansiosas
a mis ojos que no tienen calma
hasta mirarte otra tarde
y extraviarme en tu desnudez
frenesí del regreso
a la playa tibia de tu cuerpo.